—”La Economía es el área del conocimiento Humano que más se acerca a ser Ciencia sin llegar a serlo”.
No soy Economista.
Desautorizo y/o rechazo el uso de estos textos para cualquier forma de diagnóstico, tratamiento, análisis o formulación psicológica, etc. Prohíbo cualquier uso religioso de estos textos. Prohíbo cualquier interpretación ideológica de este texto, como, en enumerativo, no exclusivo: marxismo, comunismo, socialismo, capitalismo, neoliberalismo, o cualquier ideología relacionada con términos similares. Derechos Reservados.
MERCADO.
Imaginen un mundo donde los símbolos de prosperidad tienen mercado.
Símbolos como tener una casa, irse de vacaciones cada 3 meses, tener una educación de prestigio.
Trabajar el mínimo y ganar el máximo.
Y así, sucesivamente…
Ahora, esos símbolos, en un mercado pueden representar de hecho algo: una casa, unas vacaciones cada, cada, tres meses, un título de doctorado, un horario de 3 horas por 3 días a la semana y un salario de un millón, por semana.
El símbolo puede tener una expresión concreta, obvia, manifiesta, objetiva, verificable. Algo que cada símbolo, como símbolo representa, como un objeto material.
Y, hay un mercado para ellos. Un lugar, aún tan grande y distribuido, desordenado como el mundo entero en donde, de muchas maneras, a veces de cualquier manera, se puede comprar y vender los símbolos de prosperidad y los objetos que esos símbolos representan.
Es un mínimo: símbolos de prosperidad y hay un mercado para ello.
Que tengan materialidad, se añade. El símbolo significa algo, es un símbolo...
En los mercados, a largo plazo, lo que se paga por esos símbolos de prosperidad, y lo que cuesta pagarlos, el pago por ellos, se acerca al mínimo que la gente que compra y paga esos símbolos quiere pagar, y puede cobrar por ellos. La diferencia se acerca a Cero, y tiene un quiere y puede. Al mínimo en dónde la gente que los vende y la gente que los compra puede ponerse de acuerdo en comprarlos y venderlos.
Eso ocurre en el largo plazo en lo que llaman un mercado eficiente, carente de fricciones importantes. Carente de fricciones que afecten llegar a ese punto de eficiencia en el largo plazo. Algo circular, pero la fricción es una barrera que impide llegar ahí, al largo plazo…
Quizá es una manera de afirmar, que sin saber porqué, se llega ahí eventualmente. Hay barreras, simplemente parece que de alguna manera, se llega ahí. No es ciencia, eso todavía no llega.
Son palabras, símbolos, conceptos, básicos: mercado, eficiencia, fricción, símbolo, prosperidad, pago, cobro…
No hay ecuaciones en esto. Para mí, elucidar las palabras y sus significados precede hacer ecuaciones con ellos: esto no es matématicas. No es 1 + 1 = 2. Puedo ver el uno, el dos, el más y el igual. Y puedo ver que dos tiene dos unos. Es tan transparente que al manipular los símbolos, el más, veo sin duda que manipula lo que sea que 1 y 2, uno y dos, representen. Y que el resultado de la manipulación, el igual a 2, dos, es cierto. No me deja duda.
Si acepto que hay símbolos de prosperidad, que hay un mercado eficiente sin fricciones para ellos, que el largo plazo ya se cumplió entonces concluyo que lo que pago por los símbolos de prosperidad y lo que me cuesta a mí pagar por ellos sale casi igual.
Pagar por ellos en ese mercado me proporcionará un mínimo beneficio. Y un mínimo beneficio para quien los venda.
¿Porqué?, porque también hay un mercado para que tenga con qué comprarlos, y otro mercado para tener con qué venderlos. Esos tres mercados, para comprar, pare vender, y para comprar-vender, estarán conectados por el mercado para comprar y vender los símbolos de prosperidad.
Incluso, trabajar para comprarlos me proporcionará ese mismo mínimo beneficio, aún si trabajo 20 horas diarias, siete días a la semana, si decido comprarlos con el dinero que gane trabajando. Finalmente tengo que pagar por ellos, si los quiero comprar. Nadie me los va a regalar.
Y en el largo plazo, lo mismo para quien los herede, o invierta para comprarlos.
Los mercados trabajan, funcionan, se vende y compran cosas en ellos, independientemente de lo que pensemos de ellos, con calificaciones, observaciones y excepciones.
Por ejemplo, que yo no sepa de donde vienen las naranajas, mi idea como comprador de cuánto cuesta vendérmelos, no afecta mucho cuánto quiero pagar por ellas.
Que quien quiera vendérmelas como excepcionales no le garantiza que pueda venderlas al precio que solicite por ellas.
¿Porqué?, porque tengo alternativas: peras, manzanas, fresas, guayabas, etc.
Y hay símbolos sustitutivos, alternativos, de prosperidad también: Puedo tener una gran casa, una tremenda educación, un trabajo fantástico, una familia directa grandísima, etc.
¿Se vé a dónde va eso?, ¿o no?. A que cada símbolo de prosperidad me va a costar todo mi trabajo. Cada uno de ellos. En el largo plazo no podré trabajar comprándolos todos, ni heredándolos, ni aunque me los regalaran. O las tres cosas…
Y lo mismo para quien quiera venderlos. No habiendo fricciones, no habiendo barreras para llegar ahí… ¿Se vé a dónde va eso también?, ¿O no?: al engaño, a la corrupción y al monopolio. Monopolio como la habilidad, capacidad o poder de cobrar más de lo que un mercado sin fricciones me pagaría por lo que vendo. Monopolio como barrera, en el largo plazo, no sólo en el corto plazo.
Monopolio hasta como engaño, si soy el único que puede cobrar lo que quiera con ESE engaño. Tengo monopolio de un engaño particular. ¿Se vé a dónde va y fue eso?. ¡Hasta el engañador se sorprendió de tener ESE monopolio!.
Como un buen prestigitador, un buen mago: no le dice a nadie cómo lo hace. Claro un buen, bueno, prestigitador lo hace para divertirse y divertir a los demás sin lastimarse, ni a nadie más.
Todavía no entro en la economía, ni en las ecuaciones de ella, o prosperidad no lo quiera: sus “teorías”.
Meras palabras y lo que significan…
Me pregunto, rascándome la barba: ¿No describe eso el mundo actual?. ¿Sin entrar propiamente en la materia propia de la economía?.
Ahora, como dijo Buzz Aldrin, en ootro contexto: Dirían algunos… que entonces la economía se puede entender, describir o predecir con meras palabras y “lógica”.
Mi respuesta es no: La lógica y el lenguaje natural, por muy bien definido que esté, lleva a contradicciones.
Ningún sistema lógico, es decir, carente de contradicciones, suficientemente expresivo, elocuente del mundo real, predictivo del mundo real, puede utilizar el lenguaje natural. Para eso existe la hermenéutica y la retórica. No la lógica y la Ciencia. Aunque eso no está demostrado, creo, es mi conjetura...
¿Que parece lo logro?. En el mínimo: para casi explicarme la situación actual, y porqué la economía no es una ciencia.
¿Cómo explica eso que haya vendedores más prósperos que los compradores?.
Por las fricciones, por las barreras. Me van a decir que la educación vale mucho más de lo que cuesta. Que una casa es más valiosa que lo que pago por ella. Que mis vacaciones son las mejores del mundo y que me las dejaron baratas.
Que siempre puedo tener mayor descendencia, que la familia grande es grandiosa. Que las manzanas son mejores que las peras.
Que siempre puedo mejorarme y vender mejor mi trabajo. Que siempre puedo cobrar más por mi trabajo.
Que siempre merezco más por que ya me chingué por ello...
¿Cómo demuestra eso que la economía no es, no puede, ni podrá ser una ciencia?.
Imaginemos un mercado eficiente, en el largo plazo muy complejo. Enorme, gigante, complejo y complicado.
Hay una manera trivial, en el espíritu matemático de trivial que “explica” ese mercado: uno inexplicable…
Si lo inexplicable, como la mano invisible, lleva a UN mercado eficiente. No hay explicación posible para ESE mercado.
Ese mercado es INFALSEABLE. No cumple el criterio de falseabilidad de lo real. Un criterio de lo que la ciencia puede estudiar…
Y esa “mano invisible” como idea, ¿principio?, ¿metáfora? Económica tiene más de doscientos años. Claro signo de seudo-ciencia… siguen buscando explicar cómo funciona...
No es tan simple, claro, pero hay una manera trivial. Recuerden: lo que yo crea acerca del mercado, muchas, algunas, una vez, no afecta que funcione, en el largo plazo. Ergo:
QED...
“Entonces, en el largo plazo, habiendo un mercado para lo que me gusta, ¿me van a cobrar todo lo que pueda pagar por ser feliz, por hacer lo que me gusta?”.
“Eso parece…”
“Disfrutaré tanto mientras pueda y pueda pagarlo…”
“Eso hice yo...”
Gracias.
Federico Soto del Alba.